Muchos problemas de comportamiento (ladridos excesivos, destrucción de objetos, reactividad…) y emocionales (estrés, ansiedad, depresión…) vienen del aburrimiento y por falta de enriquecimiento ambiental.

Una de nuestras responsabilidades como tutores es ofrecerle a nuestro perro formas de entretenerse, gastar energía y dar salida a necesidades sociales, mentales y físicas que por sí mismos no pueden hacer. Siguen nuestras rutinas y viven en nuestros hogares donde nada está adaptado a ellos ni a sus necesidades.

Ofrecerle a tu perro juegos y juguetes que lo entretengan, diviertan y den salida a las necesidades de su especie es importante pero no lo único en lo que consiste el ‘enriquecimiento ambiental´, si quieres conocer más de este tema que es fundamental para el bienestar de tu perro puedes leer nuestro blog haciendo clic aquí

“Considera el enriquecimiento ambiental como una forma de hacer la vida de tu perro menos aburrida”

Extracto del libro Urban Sheepdog, Emily Priestly